Dijeron que el burgomaestre les comunicó que no entregaría documentos a los invasores; sin embargo, le ha otorgado el certificado de inexistencia de restos arqueológicos, que les permite a éstos la posesión de esas propiedades. Esta asociación compuesta por 64 familias se conformó en el 2002, pero por problemas de saneamiento físico legal, no se les entregó los documentos de posesión.
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