miércoles, 27 de enero de 2010

WILDER RUIZ YA NO TIENE EL APOYO DE ANDAHUASINOS.

Grupo de trabajadores pidió su expulsión de empresa azucarera.

Por reuniones secretas con defenestrado director David Jiménez Sardón.


Wilder Ruiz Loayza ya no tiene más el apoyo de los trabajadores de la empresa azucarera Andahuasi debido a las reuniones secretas que mantenía con David Jiménez Sardón, quien ya había sido expulsado de la institución cuando se descubrió su plan de querer retomar la empresa con cerca de 200 matones que provenían del Callao y La Victoria, en Lima.

Luego de un arduo debate en la Asamblea de Trabajadores andahuasinos, un grupo mayoritario pedía la renuncia de Ruiz Loayza y su expulsión inmediata, por los cargos de una visible traición cometida contra la entidad.

“A Wilder Ruiz no le quedó otra que aceptar que estas conversaciones se produjeron, aunque señaló, sin que nadie le crea, que lo hizo al ver que la fábrica estaba parada, por la falta de insumos, energía y agua y al estar la molienda paralizada y los campos de caña abandonados. Según él, trataba de convencer a David Jiménez para que se invierta el dinero que obra en sus cuentas, producto del azúcar que se vendió en diciembre, para la fábrica y el pago de trabajadores que se avecina en enero”, señaló un trabajador del ingenio.

Agregó que “era conocido que David Jiménez ponía como condición que se le nombre a él como gerente general y se designe a cinco representantes del Grupo Bustamante en el Directorio. Según Wilder Ruiz dice que aceptó, pero nadie le cree”.

Fue así que se acordó disminuir sus facultades, las que se otorgaron a Carlos Rodríguez Salcedo, autodenominado gerente general de la empresa Andahuasi S. A. C. Esta develación de las reuniones secretas entre Ruiz y Jiménez para, al parecer, seguir aprovechándose de los recursos andahuasinos, ha generado una gran desconfianza entre trabajadores y pobladores, quienes ya no saben en quién confiar para que los saque de esta grave crisis en la que se encuentran envueltos desde hace casi un año y sólo ven cómo su empresa está a punto de colapsar al no producirse un gramo de azúcar hasta la fecha.

Además, está próximo a vencer el plazo de la Conasev, para la presentación de los estados financieros, lo que podría originar un pedido de declaración de quiebra de la empresa Andahuasi. La pregunta que todos se hacen es ¿qué hubiera pasado si no se descubría este pacto secreto de Wilder Ruiz y David Jiménez? ¿Habrían retomado la empresa a la fuerza para seguir saqueándola?

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